18 abril 2012

¿Qué significa estudiar en la UNED?

Hace siete años, y después de cinco de haber terminado la carrera, decidí volver a estudiar en la universidad. Las razones de esta decisión fueron básicamente dos, muy entrelazadas entre ellas, la verdad. La primera es que con 18 años no tenía ni idea de quién era yo y qué quería en la vida, ni de la vida. El resultado es que estudié periodismo, lo que el orientador del instituto sugirió porque "se me daba bien escribir". Tras el primer año de carrera ya sabía yo que de eso no quería trabajar, porque escribir noticias en un periódico era lo opuesto a disfrutar escribiendo, pero como no sabía tampoco a qué quería dedicarme pues poco podía hacer. Cinco años después descubrí qué me gustaba. La segunda razón es que trabajando de periodista me sentía como que pasaba por el mundo sin pena ni gloria y yo, ¡qué puedo decir! tengo esos aires de grandeza del que quiere marcar alguna diferencia. Y no digo yo que siendo periodista no se pueda, que se puede y mucho, pero a mi no me valía. 


Así que decidí volver a la universidad. Esta vez a estudiar trabajo social (se admiten todo tipo de comentarios y críticas sobre si mi elección fue la más adecuada o no). Pero para estudiar trabajo social en una universidad convencional tenía que superar dos obstáculos. El primero es que en Santander, que era donde vivía entonces, no se impartía esa carrera. El segundo es que trabajaba jornada completa lo que era incompatible con acudir regularmente a clases. ¿Solución? La UNED (Universidad Nacional de Educación a Distancia). En 2005 comencé la diplomatura de tres años y aún no la he terminado (como dicen los catalanes "de mica en mica s'omple la pica" o lo que es lo mismo, con calma que ya llegaremos). Sí que es verdad, como ya sabéis, que durante ese largo periodo de tiempo hubo una sequía estudiantil, coincidente con mi vida en el extranjero, pero pese a todo...

Pero vamos al grano. ¿Cómo es estudiar en la UNED? Una cosa está muy clara y es que el que estudia en la UNED tiene que estar muy motivado y estudia porque realmente quiere y no por pasar el tiempo o por hacer algo, porque si no, lo más probable es que fracase. Hay una leyenda urbana que dice que si vas a buscar trabajo y ven que te has diplomado o licenciado (ahora se resume en que tienes el grado para no liar a nadie) por la UNED te tienen en más alta consideración que a cualquier otro candidato. No creo que eso sea tan así, pero sí que es cierto que el candidato unederiano tiene unas cualidades definidas que para algunos puestos pueden resultar atractivas. 

1.- Fuerza de voluntad. La UNED funciona así. Tú te matriculas de las asignaturas que consideres, te compras los libros que te dicen (normalmente tochos de no menos de 350 páginas) y te apañas, en la soledad de tu casa o de la biblioteca, para estudiártelo todo sin apenas guía ni ayuda. Esta viene con cuentagotas a través de tutorías en los centros que hay en las principales ciudades (de apenas un par de asignaturas por carrera, tampoco nos engañemos) y a través de los tutores en la plataforma online (que como muchas veces no se dignan a contestar a las dudas, su trabajo acaba haciéndolo otro alumno con mucho tiempo y/o muy buena voluntad). 

2.-  Capacidad de sacrificio y perseverancia. Los estudiantes de la UNED no somos ya unos pipiolos sin nada mejor que hacer que ir a la universidad. Si no que, en su mayor parte, somos gente que trabaja y/o tenemos familia, por lo que estudiar queda para los "ratos libres" que uno tiene a costa de privarse de momentos de ocio o descanso. Te sacrificas para sacarte la carrera. Este robo de tiempo suele conllevar que no vas curso por curso, sino que cada año te matriculas de las asignaturas que crees que vas a sacar (menos yo que soy una optimista y tiendo a matricularme de casi todas, si no de todas). Así no es extraño encontrarse a gente, que como yo, tarda siete u ocho años en sacarse una carrera de 3 años. Ahora bien, como soy perseverante tardaré, pero la acabaré. 

3.- Capacidad de análisis y de síntesis. Cuando yo estudiaba periodismo, los profesores se comían la materia, la masticaban hasta que quedaba una masa fina y digerible y después la regurgitaban para que nosotros nos alimentáramos de ello. Lo que el profesor decía era ya la síntesis de la síntesis de la síntesis y, por si tenías alguna duda, alguno incluso te aclaraba "esto es muy importante y es materia de examen". Ahora que estudio en la UNED me encuentro con un libro de 350 o 400 páginas y sé que en el examen entrarán dos preguntas a contestar en máximo 40 líneas cada una. Yo no sé si alguien estudia todo lo que viene en el libro. Yo no. Y supongo que la "técnica" que yo aplico es la que utiliza la mayor parte de los unederianos porque si no no me explico cómo pueden hacerlo. Yo me leo el libro. Descarto morralla y repeticiones varias. Analizo a qué conceptos le dan más importancia y me los aprendo. Los figurantes (los circunloquios para contextualizar el asunto) los pongo yo de mi propia cosecha.

4.- Adaptación a cualquier medioambiente. En una universidad convencional el profesor que te da la materia es el que te examina. Eso tiene una ventaja y otra con mucho potencial. La ventaja es que durante varias horas a la semana durante, al menos, cuatro meses, puedes analizar si al profesor le gusta que el alumno tenga autonomía y sea creativo en el examen o mejor que sea un borrego que se ciña al guión que él ha dado. O si prefiere alguien que explique lo mismo pero de diez formas distintas o que vaya directamente al grano. La potencial es que el profesor te conoce. Si eres buen alumno eso significará que te ha visto interesarte por la materia, hacer preguntas, ir a su despacho a hablar sobre bibliografía complementaria... Y como el profesor es humano, pues inevitablemente eso le influirá a la hora de evaluarte. En la UNED eso no pasa. Tú haces un examen que se envía a Madrid y un señor, señora, señorita o señorito que ni tan siquiera mira tu nombre en el membrate de la hoja, te corrige (por cierto, horrenda palabra porque ya dan por hecho de que te vas a equivocar). A la hora de decidir el estilo narrativo, cierras los ojos y te tiras a la piscina. El único punto de influencia es la calidad del resto de los exámenes. Si el resto de los matriculados han hecho un examen flojo tenderán a puntuarte por encima y si, por el contrario, tienen buen nivel y mejor que el tuyo, la nota irá a la baja. Nada más. 

5.- Resistencia a la presión. En la UNED no existe evaluación continua. Ni trabajos que te eximen de hacer exámenes. Ni nada que te facilite el resultado final. Te lo juegas todo a un examen. Si te sale bien, ganas. Si te sale mal, siempre te queda septiembre. Si ese también te sale mal, otra vez será. Para empezar, la matrícula de la UNED es cara, en relación a los servicios que te dan y en relación a cualquier universidad pública. Si además suspendes y te toca matricularte por segunda o tercera vez el coste se dispara exponencialmente (eso sin mencionar el precio de los libros pues ya comenzaríamos a hablar de robo a mano armada). Como ya no lo paga papá y mamá sino que es el esfuerzo de muchas horas de trabajo, la palabra suspender empieza a quedar fuera de tu vocabulario. Lo dicho, el estudiante de la UNED se convierte en un icono de la resistencia a la presión. 

6.- Paciencia. Por alguna extraña razón, y por más avances tecnológicos que hay, las notas de la UNED tardan una barbaridad en publicarse. Antes tenía su razón de ser, porque los exámenes eran enviados por correo a Madrid. Pero ahora han puesto unos maquinitas con las que escanean tu examen, en el momento en que lo entregas, y llega al instante al correo electrónico del profesor de turno. Pese a todo, el periodo de espera para saber una nota va entre el mes y el mes y medio. No apto para cardíacos ni impacientes.

Pero no todo es felicidad en el paraíso, ni flores en el campo. Los estudiantes de la UNED también somos conocidos por tener dos grandes carencias educativas (que pueden dar al traste con tus posibilidades de conseguir trabajo). 

1.- Exceso de teoría y carencia de práctica. Una de las cosas de las que adolece la UNED es la conexión con el mundo real. Por un lado casi todo son conocimientos teóricos, lo que hace que cuando luego te enfrentas con el día a día de la profesión, te preguntes para qué demonios pasaste tantos años estudiando si no tienes las herramientas para encarar situaciones cotidianas (y eso que en trabajo social una de las asignaturas del último año son prácticas en una organización o institución social. Eso sí, 80 horas de prácticas ¿ein?) 

2.- Información obsoleta. Aquí pongo un ejemplo. Una de mis asignaturas es Derecho e inmigración, lo que en resumen es la Ley de Extranjería. Mi libro es de 2008, lo que haría pensar que no está mal, ya que apenas tiene tres años. Pero resulta que en esos tres años la Ley de Extranjería ha sido modificada y remodificada y vuelta a modificar. Así que me consigo la última versión de la Ley y rezo para que no haya habido tantas modificaciones que no me sirva el libro para nada. Y es que aquí entra la mafia editorial de la UNED. Algunos profesores publican libros basados en la materia de la asignatura (o viceversa, que una nunca sabe) que nos obligan a comprar. ¿Que ha habido modificaciones de un año para otro? Pues se reedita el libro con los cambios y ¡Oh, lo siento! ¿que tienes la edición de 2011 en vez de la de 2012? Pues ya no te vale. ¡Anda ya, hombre! 

La conclusión es que el estudiante de la UNED al final decide no prestarle atención a todo lo negativo que la educación a distancia conlleva, porque lo que quiere es aprender y conseguirse un título mientras lo compagina con su caótica y, a menudo estresante, vida diaria. 

Y después de estas reflexiones me voy a estudiar, que en un mes comienzo los exámenes y aún no he empezado. Ayyy, que me he dado cuenta que con esta frase me acabo de cargar, de un soplido, varias de las cualidades que debería tener como unederiana. 

6 comentarios:

  1. Me he matriculado este año en primero de Derecho en la UNED. Ya poseo un título de ingeniero que he sacado en la "presencial".
    Dicho esto, lo de la UNED no lo he visto nunca, y he visto bastante en la presencial.
    ¿A qué se dedican los profesores de la UNED? A escribir libros "en el ejercicio de su libertad de catedra" que tu "en tu capacidad discente" puedes comprar o no, pero que sepas que son el texto básico de la asignatura, que las clases son para dudad y que no hay apuntes oficiales. Vamos que el libro es EL de la asignatura. Además algunos permiten llevar un libro al examen de la asignatura, pero no fotocopias, SOLO su libro. Estos libros en muchos casos NO valen el dinero que exigen por ellos, ni por su edicion ni por sus contenidos (resumenes / esquemas..) Por si fuera poco en muchas bibliotecas de la UNED no tienen ni los libros basicos de las asignaturas o bien tienen ediciones de hace un montón de años.
    Un negocio estupendo que seguro que hace el puesto de catedrático de la UNED el más envidiado por los profesores de este país.
    Supongo que en esto nadie meterá mano porque todos se lo llevan a su bolsillo. ¡Y es mucho dinero!
    ¿Sería mucho pedir que los profesores elaboren los contenidos didácticos de los cursos que imparten y los pongan a disposición de la UNED como parte de su trabajo?
    UN ROBO, ESO ES LO QUE ES

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  2. Totalmente de acuerdo con lo que habéis dicho..Noctambula me ha encantado el minucioso recorrido por tu vida estudiantil y posterior desencanto en la Uned.. Es mi primer año y estoy bastante decepcionada. Tenia una duda que no sé respecto a los exámenes y es que si ahora en Septiembre no me presento a esta conovocatoria que suspendí en Febrero, tengo más oportunidades de hacerlo en otro momento más adelante o ya no hay mas... en Diciembre no existe convocatoria no..???? Gracias de antemano!!!

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    1. Hola anónima. Lamento comunicarte que en la UNED sólo hay tres convocatorias: febrero, junio y septiembre. Si no te presentas ahora al examen tendrás que matricularte de la asignatura ENTERA para cursarla el próximo curso. Hay una convocatoria en diciembre, pero sólo aplica a aquellos estudiantes que estén en el último año de la carrera. Te mando muchos ánimos (a mí me costó 8 años acabarla pero lo hice y la satisfacción que sentí el día que me dieron la última nota no soy capaz de expresarla) y paciencia. Te recomendaría que te centraras en la materia que tienes que estudiar, que es lo que te gusta y lo que te motivó a apuntarte y te olvides del resto. De ese modo te ahorrarás unos cuantos momentos de frustración-desesperación-mala leche. Anímate a presentarte a septiembre, que entra dentro del precio y quién sabe, a lo mejor te llevas una sorpresa. :o)

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    2. Muchas gracias por tu pronta respuesta! la verdad que motivación tengo poca...yo quería estudiar Arqueología pero como no existe como tal me matriculé en Historia allá por el año 2001. Como tenía que compaginarlo con otra carrera que hacía por entonces y que es mi pasión, el Ballet, dejé los estudios temporalmente. Cuando quise retomarlo, a parte de haber cambiado dos o tres veces los planes de estudios, ya no existía mi carrera como tal y ni rastro de mis maravillosas clases presenciales donde un lunes cualquiera se convertía en un viaje a través del tiempo que me fascinaba!! A parte de esto y "gracias" al Plan Bolonia me encuentro que han unido Geografía con Historia . Decido entonces matricularme este año en la Uned de dos asignaturas de Geografía que sé que tengo que hacer( muy a mi pesar ya que no tengo ni la más remota idea..) En Febrero voy con toda mi ilusión y me suspenden...En Junio hago la otra , me vuelven a suspender. Reclamo porque no me lo podía creer y mando un email a la catedrática que me lo había corregido. Me contesta diciendo que efectivamente mi examen esta aprobado INCREIBLE!! es precisamente lo que tu escribes más arriba, según el nivel de los demás exámenes el tuyo puede caer en gracia o estar por debajo.. yo me sentí aliviada porque sabía que tenía razón pero por otro lado muy decepcionada con que una profesora-catedrática no le haya prestado el suficiente interés a mi examen como para darlo por apto.(que además así era..) En fin...ella me decia "suerte para septiembre y feliz verano.."yo que entre trabajo, verano, playa, trabajo, baile, playa, trabajo y baile..no he cogido un libro, me veo a menos de una semana del examen con cero ganas y la moral por los suelos. Es por eso que pregunté si habría alguna posibilidad de retrasar la convocatoria o algo por el estilo y cuando me sintiera capaz hacerlo dignamente.Ya veo que no es así.
      Bueno, que veo que me he "enrollado" más de la cuenta pero reconozco que esto de escribir libera tensiones.....ja!!, Un saludo a todos desde mi rincón de incertidumbre intelectual.

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    3. Hola Anónima, no te preocupes, tú saca vapor, que es bueno para el cuerpo y la mente. :o) Ya veo que eres como yo, un culo inquieto que necesita estar haciendo cosas todo el tiempo. No te puedo decir otra cosa que mucho ánimo y que sí, que es una vergüenza lo de las correcciones. Yo entiendo que tienen un montón de exámenes que corregir, pero a veces sospecho que lo corrigen becarios, porque yo he hecho exámenes impecables que han tenido notas mediocres y exámenes en los que he dejado la imaginación volar en donde he obtenido buenas calificaciones.

      Mi recomendación es que te mires los exámenes de años anteriores y si no tienes tiempo te estudias las 4 preguntas que más han entrado y te presentes al examen. Quién sabe de qué humor estará el que te corrija. ;o) Un saludo y muchísima suerte!!

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  3. ¡Hola Noctámbula! Habías empezado muy bien tu discurso pero el final me ha gustado menos. No estoy de acuerdo contigo en algunas cosas... Una de ellas, es en la parte que citas lo siguiente: "En una universidad convencional el profesor que te da la materia es el que te examina. Eso tiene una ventaja y otra con mucho potencial..." yo discrepo; respecto a este punto diría que la presencial tienes la ventaja como bien dices, de conocer y "estudiar" a la persona que luego te va a examinar, pero también hay que contar conque te puede tocar un profesor que te haga la vida imposible (a ti concretamente o a la clase entera porque -con perdón- sea un enorme cabrón y esto por desgracia no es raro que pase...); también dices en otro punto que "En la UNED no existe evaluación continua. Ni trabajos que te eximen de hacer exámenes. Ni nada que te facilite el resultado final" cosa que no es verdad, tengo conocidas estudiando en la UNED y que les digan a ellas que no tienen trabajos para hacer... (¡OJALÁ!). Por otra parte, amigas que estudian en la presencial tienen trabajos y exámenes que van por separado igualmente, es decir, que los trabajos no eximen a los exámenes ni estos a los trabajos. ¿Qué los libros son caros? ¿Y qué libro no es caro hoy en día? Por desgracia, actualmente casi cualquier libro medianamente "decente" -por así decir- que compres son mucho más caros que una botella de ron, mismamente. ¿Que la UNED no es nada práctica? Para conseguir cualquier título has de pasar por unos estudios reglados donde te vas a encontrar mucha "morralla" cosa que particularmente, no veo tan mal... pero sí que es cierto que estaría genial que se centraran más en la práctica antes de meter otros temas que podrían ser más prescindibles; pero eso ocurre en las universidades presenciales, en grados superiores/medios... o por lo menos en la gran mayoría de estudios reglados. De todos modos, yo respeto tu opinión (¡faltaría más! :-p) pero en mi humilde opinión, todo tiene su lado bueno y su lado malo (como todo en la vida). Mi experiencia hasta ahora en la UNED está siendo buena; estoy muy de acuerdo contigo en algunas cosas negativas que mencionas y que claramente se podrían mejorar... pero por otra parte, creo que tiene otras muchas cosas buenas a tener en cuenta en función de los intereses que uno tenga en mente. Hay personas a las que les interesa más una presencial porque les cuesta más autodisciplinarse (por ejemplo), otras prefieren organizarse el estudio ellas; hay quien prefiere ver las clases online porque le viene mal desplazarse (cosa que si se quiere con la UNED también se puede hacer aunque obviamente no serán las mismas horas que una presencial) y luego están los que se apañan mejor con un profesor que de la clase. Por otro lado, tienes a los que quieren sacarse una carrera por vocación y disfrutan estudiando y aprendiendo cosas... y los que prefieren por diversas circunstancias sacársela estudiando extrictamente lo necesario (en ese sentido quizá es mejor una presencial si se puede pero sigo recordando que si te toca un mal profesor te la puede jugar igualmente). Por esto mismo no le veo mucho sentido el sacarle punta solo a los aspectos negativos de la UNED ya que creo que todo tiene cosas buenas y malas y la elección dependerá mucho del juicio de la persona que esté interesada en iniciar una carrera, para lo que unos es malo para otros no, y de al revés. ¡Un saludo!

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